En Cazorla, en "La Plaza vieja" están las ruinas de Santa Maria (construcción de Vandelvira). Y justo enfrente el castillo de la Yedra. Otros monumentos destacables de este precioso lugar, son la fuente de las cadenas, o la propia plaza, que antaño fue una plaza de toros. |
El municipio de Cazorla pertenece a la comarca Sierra de Cazorla y está dentro del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas. |
El municipio tiene las siguientes pedanías: El Almicerán, Casas de Estepa, El Molar, El Valle, La Ribera, Los Peralejos, Nava de San Pedro, Puente de la Cerrada, Vadillo-Castril, Valdecazorla. |
Aunque todavía no existe un estudio definitivo, la primera variante del nombre de Cazorla se debe a Yakut en el siglo XII que cita Quasturra como una ciudad de Al Andalus, entre Jaén y Baeza. |
El pueblo de Cazorla se encuentra a 886 metros sobre el nivel del mar. La superficie del término municipal se reparte entre terrenos de montaña de muy alta calidad medioambiental y natural, con repoblación de pinares, una flora y fauna variada y abundante que suponen las dos terceras partes del total al este, y, al oeste, los terrenos de cultivo ocupados por el olivar y herbáceos. |
En este municipio, cabecera de comarca, se ha desarrollado el turismo de interior ligado a la naturaleza, siendo esta actividad económica una de las de mayor importancia junto al cultivo del olivar. La ganadería ovina y la actividad forestal complementan a las actividades agrarias principales. |
GENTILICIO: cazorleño o cazorlense |
HABITANTES: 8.132 |
La Comarca Sierra de Cazorla se encuentra situada en el sureste de la provincia de Jaén, limita al noreste con la Sierra de Segura, al noroeste con la comarca de La Loma y Las Villas, al suroeste con Sierra Mágina y al sur y sureste con la provincia de Granada. Tiene una superficie de 134.037 hectáreas y está integrada por los términos municipios de Cazorla, Chilluévar, Hinojares, Huesa, La Iruela, Peal de Becerro, Pozo Alcón, Quesada y Santo Tomé, así como numerosas aldeas y cortijadas que se distribuyen a todo lo largo y ancho de una impresionante geografía coronada por las sierras de Cazorla, Quesada, el Pozo y La Cabrilla. |
Si algo caracteriza a la comarca es la variedad en paisajes y ecosistemas, con altitudes que van desde los 2.100 metros en la Sierra de la Cabrilla hasta los 360 metros en las proximidades del Puente de la Cerrada. Altas cumbres se mezclan con profundos barrancos, suaves relieves y amplios valles, bosques, olivares, pastos de alta montaña y huertas, zonas húmedas, secas y semidesérticas. |
La elevada altitud media, que sobrepasa los 1.000 metros, dota a estas serranías de una espectacular belleza, encontrándose numerosas cumbres que rebasan los 2.000 metros. La altitud asciende de oeste a este, pero no de forma continua, sino formando dientes de sierra cuyos salientes y entrantes son progresivamente más pronunciados, alternando cursos fluviales y líneas de cumbres, tanto más altas cuanto más nos adentramos en las sierras. |
El clima se caracteriza por inviernos fríos con abundantes precipitaciones (de nieve por encima de los 1.200 metros) y veranos secos y calurosos. Las precipitaciones oscilan entre los 400 mm. en las zonas bajas de la parte sur-occidental de la comarca y los 1.600 mm., incluso 2.000, en las cumbres. La temperatura media anual muestra un clima relativamente suave. |
Las características naturales del territorio han condicionado el uso y aprovechamiento del mismo. Los usos tradicionales son el aprovechamiento ganadero y forestal, la explotación de pequeños minifundios de cultivos tradicionales (olivar, cereal y huerta), la caza, la pesca, la recolección de setas y frutos silvestres del bosque y una variada artesanía popular, esparto y mimbre principalmente. Estos usos han dejado paso a nuevas actividades económicas, principalmente empresas de servicios, sobre todo turísticos, en el área del Parque Natural. La expansión e intensificación del olivar, que ocupa en la actualidad el 70% del área cultivada, se sitúa en superficies tradicionalmente dedicadas a otros cultivos, cereal en la campiña y hortícolas en las fértiles vegas del Guadalquivir y el Guadiana Menor. |
A vista de pájaro en el paisaje de esta comarca se pueden distinguir las sierras, al este y la campiña y las depresiones del Guadiana Menor y Guadalquivir, al oeste. |
Desde cualquier punto de entrada a nuestra comarca aparece la Sierra de Cazorla como telón de fondo de un maravilloso escenario paisajístico. Varias sierras se alinean de este a oeste disminuyendo de altitud: La Cabrilla, Pozo, Cazorla y Quesada, separadas por el valle del Guadalentín, el valle del Guadalquivir y por la falla de Tíscar. |
Entre las sierras y las depresiones aparece la campiña, su relieve es suave y alomado. Tradicionalmente las zonas más bajas, por debajo de los 600 metros, estaban ocupadas por tierras de labor (cereal, leguminosas, etc.), mientras que a medida que se ascendía en altitud, el olivar era el cultivo dominante. Cerca de los pueblos, aprovechando los pequeños cursos de agua y los bancales tradicionales, permanecen aún huertas y frutales. En la actualidad el olivar ha ido desplazando al resto de cultivos, las lomas están ocupadas por un inmenso mar de olivos, interrumpido aún por algunas parcelas de tierra calma y pequeñas huertas, todo ello, enmarcado por las sierras circundantes. En las zonas más secas los almendros salpican de blanco la primavera. |
· Iglesia de San Francisco: Perteneció al Convento de los Padres Franciscanos. Es de estilo barroco del siglo XVII, y de fachada sencilla que combina toba y ladrillo. Su planta responde al estilo jesuita con arcos laterales, cabecera recta, bóveda de medio cañón con lunetos y cúpula sobre pechinas en el crucero. Retablos, imágenes (de Castillo Lastrucci y Jacinto Higueras) y pinturas al fresco son posteriores a la guerra civil. Sin embargo en esta iglesia recibe culto la imagen más venerada de la ciudad: el Santísimo Cristo del Consuelo. Se trata de un lienzo con una curiosa historia. Existía a finales del siglo XVI o principios del XVII un cuadro que representaba la imagen de un crucificado de tres clavos, con fondo neutro y la figura de dos orantes a sus pies, seguramente los marqueses de Camarasa, que por un tiempo detentaban la titularidad del Adelantamiento. Parece ser que este cuadro se encontraba en una capilla particular de la iglesia de Santa María. La gran devoción se empezó a gestar cuando a raíz de una gran tormenta y riada en 1694, que causó graves daños en el templo y arrastró parte de los objetos de culto, el cuadro pareció salvarse milagrosamente. Bien porque la devoción seguía creciendo y el pueblo quiso tener su propia imagen, bien porque los marqueses retiraran el lienzo cuando dejaron la titularidad del Adelantamiento y entonces se hiciera otra copia; lo cierto es que en el siglo XIX sabemos que existe otro lienzo del Cristo del Consuelo, que tiene culto en esta iglesia, donde la gente lo podía venerar. Sin embargo, este lienzo ya no era igual al anterior. El nuevo era un cristo de cuatro clavos (al estilo del de Velásquez), y su imagen no se alza sobre fondo neutro, sino sobre una población que ocupa la parte inferior del cuadro. Tampoco es este cuadro el que se conserva en la actualidad, pues fue destruido en el año 1936. El lienzo que podemos ver actualmente es una copia del mismo encargada a Mariano Madrazo y Lope de Calle. La feria de Cazorla se celebra el 17 de septiembre en honor al Cristo del Consuelo, que sale ese día en procesión. |
· Iglesia de San José o Parroquia de Santa María: Sede de la Parroquia de Santa María, fue convento de Agustinas Recoletas, de la segunda mitad del siglo XVII. Como casi todos los edificios religiosos de la zona, no conserva importantes obras de arte, debido por un lado a la desamortización, y por otro a los sucesos acaecidos durante la guerra civil. En su interior hay hermosas tallas de Navas Parejo y Castillo Lastrucci y seis grandes lienzos copias del Greco, realizadas por Rafael del Real, que recuerdan la pertenencia religiosa a la sede de Toledo del antiguo Adelantamiento. El retablo mayor es obra del burgalés Valeriano Martínez. La fachada es sencilla, y en la portada podemos destacar dos relieves procedentes de la antigua iglesia de Santa María, uno de la Natividad y otro de Dios Creador. |
· Iglesia del Carmen: Tiene una torre octogonal. Fue templo del Colegio de la Compañía de Jesús, y luego hospital de los Padres Carmelitas Descalzos. Su traza es de Blas Antonio Delgado, siglo XVII. De una sola nave, cubierta con bóveda de medio cañón con lunetos, crucero con bóveda de media naranja sobre pechinas, y capillas laterales; estilísticamente repite el modelo de iglesia jesuítica o de contrarreforma. La portada principal es de tintes manieristas y está coronada por un gran escudo de la Casa Real Borbónica. La torre, cuadrada en la base, con remate octogonal, responde al modelo utilizado en su día por Vandelvira que siguen otros arquitectos de la provincia. |
· Ruinas de la Iglesia de Santa María: De traza renacentista, siglo XVI se ha venido atribuyendo al gran arquitecto Andrés Vandelvira, muy vinculado a la familia de los Cobos (que durante algún tiempo fueron Adelantados de Cazorla) Sin embargo, no hay documentos que lo demuestren. Por otro lado, la intervención del arquitecto Alonso de Barba, alumno aventajado y seguidor más fiel del maestro en todas sus obras inconclusas, resulta innegable, además de aparecer su nombre en una cartela de la portada principal. No sabemos, por tanto a ciencia cierta si se trata de un proyecto de Vandelvira que concluye Barba, o del propio Barba. En cualquier caso podemos hablar con toda propiedad de escuela vandelviriana. |
· Castillo de las Cinco Esquinas o de Salvatierra Ubicado en las cumbres del cerro de Salvatierra tiene un acceso difícil. Conserva un torreón de planta pentagonal y restos de la muralla. Aunque algunos autores citan su origen árabe, no parece probable, sino más bien del siglo XIV, cuando hay un auge constructivo de torreones y defensas en la zona cristiana vecina al reino de Granada, que vive un momento de esplendor y apogeo peligroso para los cristianos. Fue declarado Monumento Histórico Artístico en el año 1985. Actualmente no tiene ninguna utilidad. |
· Las ermitas de Cazorla: En los alrededores de Cazorla existen una serie de ermitas que si bien no tienen gran valor artístico, por estar muy reformadas, merecen la pena una visita por el entorno en el que se encuentran. Entre las ermitas conservadas se cuentan las de San Sebastián, San Miguel Arcángel (recientemente restaurada con hermosas pinturas decorativas de estilo muy moderno en su bóveda), la de la Virgen de la Cabeza y la de San Isicio. Algunas de ellas tienen su origen en el siglo XVI, a raíz de la construcción de Santa María, pero se fueron remodelando con el tiempo, de manera que los elementos constructivos más antiguos son de los siglos XVII y XVIII. Arquitectónicamente son sencillas, hechas de piedra y a veces encaladas, todas tienen arco de medio punto en su acceso y varias conservan un pórtico o nártex.Algunas fueron saqueadas en la guerra civil y han estado abandonadas hasta épocas recientes. Actualmente no tienen culto y diversas asociaciones se han hecho cargo de ellas. |
· Castillo de la Yedra: Alberga en su interior el Museo de Artes y Costumbres Populares del Alto Guadalquivir. También se conoce popularmente como Castillo de las Cuatro Esquinas, para diferenciarlo del castillo de Salvatierra o de las Cinco Esquinas, cuya torre del homenaje tiene planta pentagonal. De origen probablemente almohade puede datarse a finales del siglo XIII, si bien el castillo actual procede de la época del Arzobispo D. Pedro Tenorio que en el siglo XIV restauró y consolidó la fortaleza, amenazada por la proximidad del reino de Granada, siendo frecuentes las escaramuzas entre cristianos y musulmanes. Está en buen estado de conservación. |
El castillo se articula en tres recintos; el primero se trata de una albacara musulmana, que probablemente acogería una reducida población local o una guarnición. A estas murallas construidas esencialmente en tapial se han adosaron tras la conquista castellana, cubos de buena sillería; el recinto intermedio ofrece una variedad de técnicas constructivas que testimonian las reiteradas reformas introducidas en la fortaleza. Sobre la puerta campean las armas del arzobispo Sandoval y la fecha 1606; por último el tercer recinto está constituido por el alcázar con la torre del Homenaje, de planta cuadrada, con aljibe y tres salas. Estos dos recintos son obra castellana, realizados a lo largo del siglo XIV. |
En los siglos XVII y XVIII pierde importancia estratégica y su significación bélica y sólo vuelve a cobrar importancia en la Guerra de la Independencia. |
Durante la desamortización del XIX, pasó a propiedad del patrimonio municipal, y después, a través de una venta, pasó a manos privadas. Finalmente, en 1972, se expropia y se restaura para instalar en él un museo de Artes y Costumbres Populares, que abre sus puertas en el año 1983, y dos años más tarde es declarado Monumento Histórico Artístico. |
El Museo Alto Guadalquivir consta de dos partes: una sección histórica, situada en la Torre del Homenaje, y otra sección de artes y costumbres en una edificación anexa. En esta última podemos encontrar, en la entrada al castillo, algunos útiles agrícolas (trillos, arados, ubios…). En la segunda sala se encuentran tres maquetas de molinos de aceite de distintas épocas y cerámica, tanto árabe, encontrada en el castillo, como popular, de procedencia diversa. En la última sala se reproduce una típica cocina cazorleña, con todo su ajuar, además de maquetas de cortijos típicos y vajilla cerámica. |
En cuanto a la sección histórica, consta de tres salas: la primera dedicada a capilla, con un Cristo de estilo románico-bizantino, rodeado de óleos que representan a los apóstoles, datado en el siglo XVII, y una figura de San Ambrosio de la misma época. La segunda planta está dedicada a Sala de Armas, con panoplias con diversas armas, así como armaduras y diverso mobiliario de los siglos XVI y XVII. Por último, en la tercera planta se ubica la sala noble, con tapices flamencos de Ian Raes, siglo XVII, y constructivos bargueños del siglo XVII-XVIII. Esta sala contiene los mejores elementos, con las ventanas geminadas y una magnífica bóveda ojival. |
Relacionada con el castillo está la popular leyenda de la Tragantía. Para visitar: El castillo tiene acceso en vehículo particular. El acceso a pié es de unos quince minutos desde la Plaza de Santa María. Castillo de la Yedra. C/ Camino del Ángel, s/n (Cazorla) Tlf.: 953 71 16 38. Horario: de miércoles a sábado de 9.00 a 20.00 Martes: de 14.30 a 20.00 Domingos y Festivos: de 9.00 a 14.00. Entrada libre. |
· Casa de las Cadenas: Palacete de estilo neorrenacentista, edificado en el S. XIX , sobre una antigua casa de campo de los marqueses de Camarasa. Es una de las construcciones civiles más destacadas de Cazorla. Su fachada está rodeada por un conjunto de columnas unidas con gruesas cadenas que dan nombre al palacio. Cuenta con un amplio jardín de 12.000 m2 de superficie. Es una propiedad particular. |
Declarada Monumento Histórico. |
· Antiguo Convento de la Merced: Construido en el siglo XVII, alberga actualmente el Ayuntamiento y el teatro de Cazorla. Su fachada, como en otros antiguos conventos, combina ladrillo y piedra y es de gran sencillez arquitectónica. Los elementos mejor conservados son la torre campanario, el patio columnado (recientemente reformado) y la capilla, hoy transformada en sala de cine y teatro. Su claustro se utiliza también para exposiciones temporales. Para visitar: dias laborables. |
· Antiguo Convento de San Juan de la Penitencia: Fue convento de religiosas de Santa Clara, fundado en 1513 por García de Villarroel, sobrino del Cardenal Cisneros. Su portada es renacentista, de líneas muy puras y elegante arco de medio punto con pilastras. Fue posteriormente cárcel y en la actualidad Albergue Juvenil, por lo que su estructura está totalmente cambiada, aunque sí conserva bien su fachada. |
· Palacio de la Vicaría: Edificio de finales del siglo XVII que tuvo funcionalidad religiosa por su origen y patrocinio, puesto que tenía capilla y en él residieron autoridades religiosas, aunque no tuvo fines de culto. Conserva la fachada original pero su interior está bastante alterado. |