Situado en la comarca Nororiental de Málaga, con una rica herencia histórica, un entorno natural suave y una economía centrada en el cultivo del olivar.
Villanueva de Algaidas es un municipio de la provincia de Málaga, en Andalucía, España. Se encuentra en el noreste de la provincia de Málaga, dentro del partido judicial de Archidona y a unos 66 kilómetros de la capital. Su término municipal abarca una superficie de 70,5 km² y se asienta entre suaves lomas y cerros, con altitudes que oscilan entre los 510 y 580 metros sobre el nivel del mar. Al sur destacan dos sierras: la Sierra de Arcas y la Sierra de Pedroso, que alcanzan hasta 1024 metros y aportan un relieve más abrupto al paisaje.
El municipio cuenta con una población aproximada de 4066 habitantes en 2024, con una edad media de 45,9 años. El gentilicio de sus habitantes es algaideños. La localidad está compuesta por cuatro núcleos de población y disfruta de buenas comunicaciones, situándose cerca de las autovías A-45 y A-92, lo que facilita el acceso a Málaga y Córdoba.
El nombre “Algaidas” proviene del árabe y significa “bosque espeso” o “monte verde”, lo que refleja la vegetación que antiguamente cubría la zona. Su economía se basa principalmente en la agricultura, con un predominio del cultivo del olivar, que ocupa más del 80% del terreno cultivado. También se cultivan cereales como trigo, cebada, y legumbres como garbanzos y habas, además de girasol y anís.
En cuanto a servicios, Villanueva de Algaidas dispone de centros educativos de infantil, primaria y secundaria, una biblioteca pública y un consultorio médico. El municipio celebra diversas fiestas populares, como la Feria de Agosto.
Festival Internacional del Folclore de Villanueva de Algaidas: El Festival Internacional del Folclore de Villanueva de Algaidas reúne a grupos de danza y música de todo el mundo, celebrando la diversidad cultural a través de espectáculos vibrantes. Este evento se ha consolidado como un referente del folclore internacional en la provincia de Málaga, al mismo tiempo que fomenta un enriquecedor intercambio cultural. Los grupos locales tienen la oportunidad de compartir su tradición y folclore con otros pueblos participantes, creando una experiencia única para todos los asistentes.